Por: Dra. Glenda Jones Pérez

En el Día de la Infancia, no hay mejor manera de celebrarlo, que hablando del respeto que merecen nuestros niñxs, porque sí, nuestros niños merecen respeto.

Parece difícil, no es así como fuimos educados, de repente, como madres o padres, descubrimos cuántas dudas tenemos, nos enfrentamos al reto de educarles y empezamos a sentir que la persona que prometimos ser, se aleja de nuestra vista. En verdad es todo un desafío, tomar a ese ser humano indefenso y convertirlo en un adulto listo para la vida, enseñarle todo lo que necesita para ser feliz y vivir correctamente.  Este desafío resulta abrumador, y nuestros instintos pueden ser reacciones emocionales, a veces negativas. Como madres y padres podemos sentirnos desamparados, incapaces, o pensar que el castigo es la respuesta, pero existe otro camino: La Disciplina Positiva.

Jane Nelsen  definió las bases de la Disciplina Positiva, defendiendo la premisa de que la clave de la educación está en el respeto entre personas y no en el castigo.

¿Qué es la Disciplina Positiva?

Es un sistema de principios diseñado para convertir a los niñxs en adultos responsables, respetuosos y llenos de recursos para la vida. ¿Quién no quiere eso para su hijo? Esta filosofía ayuda a entender la conducta inadecuada de los niños, promoviendo actitudes positivas hacia ellos y enseñándoles a tener buena conducta, responsabilidad y destrezas interpersonales. Se basa en que los adultos, ya sean madres, padres o educadores usen la amabilidad juntos a la firmeza a partes iguales, el equilibrio entre ambas es muy importante.

¿Te parece interesante?  ¿Quieres intentarlo?

Aquí te dejo algunos tips para iniciarse en la tarea de educar desde el respeto:

1ro. Ser ejemplo: lxs niñxs aprenden lo que ven

2do. Distraerle: introduce un estímulo nuevo si la conducta actual está a punto de convertirse en berrinche.

3ro. Evita el NO, trata de usar frases en positivo, deja el no, para situaciones peligrosas o indeseadas, que su uso sea excepcional.

4to. Consistencia y Firmeza, los límites no pueden depender de nuestro estado de ánimo.

5to. Anticipación, reconocer las señales previas a un berrinche o perreta y adelantarse tomando acciones para evitar que se desencadene

6to. Ignorar los comportamientos negativos, ignora las perretas y verás cómo se extinguen por sí mismas, parece que no, al inicio, pero si funciona

7mo. Hacerle responsable, dependiendo de su edad, regar una planta, poner la mesa, le ayudará a ser responsable y sentirse útil

8vo. Permitirle decidir, reafirmarás su seguridad y entenderá que puede tomar decisiones en algunas cosas, otras no.

9no.  Ser concisxs al explicar, una vez, claramente

10mo. Durante una perreta, no discutir, espera a que se haya calmado

11no. Ayudarle a analizar, para entender las consecuencias de sus acciones, también lo positivo.

12mo.Cada esfuerzo tiene una recompensa, no le des lo que desea, ayúdale a definir metas para alcanzar lo que desea.

13. Permite que experimente la frustración, no les ayuda si le evitamos el sentimiento, para desarrollar tolerancia a esta, es necesario permitir que la sienta y motivarlo a seguir intentándolo.

Sé que es difícil iniciar el proceso de deconstrucción personal e implementar la Disciplina Positiva, pero espero que lo intentes, que no te frustres, y sobre todo, que tengas ganas de seguir intentando. Me dejas saber si mis consejos fueron de ayuda.